Respecto de la experiencia de nuestra hija en la Fundación Talento Matemático y Científico podemos decir que allí encontró su vocación a una edad muy temprana. La forma de enseñar las matemáticas es muy diferente a la que se observa en las aulas convencionales, respecto de la forma y el contenido. Mucho más natural y participativa.
También destacamos la buena acogida y el buen trato humano tanto de los docentes como de sus compañeros mayores que hicieron que se integra se muy rápido y con muchos vínculos.
Les pedimos fuerzas y ganas para seguir mejorando en los aspectos organizativos y que muchos más niños puedan disfrutar de esta oportunidad.